Lulu

La conocí aquella tarde, un 24de Setiembre de 1998. Me acuerdo de la fecha porque ese dia llegué a Tarapoto. Ella estaba tras el mostrador de una farmacia. Me acerqué a preguntar por la dirección del colegio farmacéutico, y ella, con ese don que la caracteriza, me indico con gran gentileza donde debería hacer las gestiones de colegiatura. Desde ese día, hasta la fecha, hemos sido y somos muy buenos amigos. Mis cuitas de amor han sido transmitidas a sus oidos por mi voz, sus penas y tristeza viajaron en sentido inverso. Es fácil poder expresarse frente a un alma generosa y fiel. Cuando la conoci ella tenía un enamorado. La relacion era muy complicada y por consiguiente, triste. El tenía un problema muy difícil de superar (no deseo ahondar al respecto) y ese era el motivo de discusiones y tristezas. Estuvieron muchos años juntos, y durante ese tiempo he visto como las lagrimas caían con frecuencia de los ojos de ella. Resultaba muy difícil que ella adoptara una decisión, hasta que los límites rebasaron lo permisible. Hace unos días, la tuve frente a mi, después de 3 años. La visité en su nuevo trabajo y de allí, como recordando viejos tiempos, nos fuimos a un pub a tomar unas cervecitas. Nos pusimos al día en aquellas breves horas. Ella me contó que con mucha tristeza, dejó atrás aquella relación, y lo mucho que sufrió. En su desesperación de encontrar afecto, que supla lo anterior, intentó involucrarse con nuevas personas, pero no funcionaron. Tiempo después, mucho mas calmada, supo identificar que una persona, que siempre la tuvo a lado, era la persona que amaba, y él siempre la esperó. Llevan varios meses juntos. Creo que mi amiguita esta vez ha encontrado la felicidad, se nota en su semblante, en su sonrisa, en su mirada. Estoy muy contento por ella. Detrás de la melancolía que me provocó el estar y regresar de Tarapoto, lo que mas alegra el corazón es que, ella, una amiga mía, se encuentra en este momento muy feliz. Me aúno a su felicidad, porque deseo sentir eso en mi. Gracias LULU. JOSE FELIX